En EL OTRO hice un análisis del proceso al final del trabajo porque me parecía que no había mostrado todo el material y ejercicios por los cuales había pasado para concluir en la entrega final. Me resultó bastante interesante hacerlo, porque me permitió observar todas las instancias desde un punto de vista más lejano y objetivo, y siento que me hace ser más consciente de lo que transité y así lo puedo expresar mejor. Por eso decidí hacer una entrada con el proceso de LA COSA. Intentaré no ser reiterativa.
Nuestra idea surgió mientras debatíamos qué situación podíamos contar, yo comenté que había visto El Niño, y que la situación más mínima podría ser fructífera para este trabajo, si sabíamos cómo tratarla. Allí Laura comentó que su tía tenía un muñeco con el que convivía, lo vestía, etc. Fascinadas por esto, presentamos la idea, y conseguimos que su tía nos preste el muñeco. Fuimos a buscarlo y descubrimos que la casa en la que vivía era aún más interesante que el muñeco, por lo que nuestra visita se basó, en su mayoría, en una exploración de la casa.
Como no podíamos filmar en esta locación, llevamos al muñeco a mi casa y filmamos allí. En primer lugar queríamos mantener oculto que el muñeco era, justamente, eso, y hacerlo pasar como una persona hasta el final. Para eso nos guiamos por las escenas de El Niño y Lars and the Real Girl, en la que los personajes descubren que se trata de un muñeco siendo tratado como una persona.
El Niño (2016)
Lars and the Real Girl (2007)
Como nos pasó durante todo este trabajo, se nos dificultaba decidir el diálogo que tendría el personaje con el muñeco, sentíamos que todo lo que probábamos era inverosímil, pero a la vez no creíamos que una relación entre dos supuestas personas pudiera quedar muy clara sin diálogo de por medio.
Extras:
Lo que me interesa de esta idea es comprender un poco la tendencia a personificar ciertos objetos que tienen un valor sentimental para nosotros, y que por lo general vienen a cumplir un rol de sustitución de ciertas cosas (ya sea desde chicos con un juguete, hasta lo que puede significar para algunas personas sus intrumentos, o hasta aparatos electrónicos). Creo que proyectamos ciertos deseos en ellos y a veces pensamos que son irreemplazables por una carga emocional que nosotros mismos les atribuímos. Dicho esto, cuando se trata de un objeto con características físicas humanas esta personificación se incrementa. Hasta el punto en el que tuve que convivir con este muñeco y los dos primeros días no me podía dormir de solo pensar que estaba en la habitación de al lado. Sin embargo luego de una semana ya lo tomaba como algo completamente natural y humorístico (¿cuántas veces voy a poder convivir con un maniquí?).
Cena de despedida
Nos perturbó un poco darnos cuenta de que parecía que al muñeco le cambiaba la cara dependiendo el día y notamos que en ciertas circunstancias, dependiendo desde dónde lo filmáramos, nos daba la sensación de que estaba incomodo o sufriendo. Nos pareció interesante mostrarlo atrapado, sin posibilidad de desprenderse de esa situación. En la película Air Doll pasa algo similar: un hombre tiene una muñeca sexual con la que comparte sus días, pero llega un punto en la película en la que la muñeca cobra realmente vida, solo que el dueño no lo sabe, por lo que sigue practicando las mismas acciones con ella como si fuera una muñeca, lo que en situaciones se vuelve incómodo para el espectador, que sufre por la propia chica. No pude encontrar la escena que quería, pero dejo el trailer de la película:
Observando las características que tenía la casa de la tía de Lau, Leo y Flor nos aconsejaron que la consiguiéramos como locación, ya que le podía dar un tinte totalmente distinto a la historia. Por suerte, pudimos convencer a la señora para filmar en su casa, y para que actúe. Pudimos explorar partes de la casa que no habíamos visto, y tratamos de simplificar la acción un poco.
Al estar un poco a la deriva con la acción en sí, Leo y flor nos aconsejaron que organicemos bien todos los aspectos para concentrarnos en un solo día de rodaje.Creo que desde un principio entendieron a lo que nosotras queríamos llegar y confiaron en que lo podíamos resolver bien a pesar de la mala calidad técnica de los videos que llevábamos.
En el cambio de profesores se nos planteó que no se entendía a qué quería llegar el personaje. Nosotras consideramos que eso era lógico porque es difícil plantear todo un universo psicológico dentro de la mente de un personaje en un video de 2 minutos. En ambas correcciones nos aconsejaron que busquemos una acción más cotidiana para que no sea todo tan sobreactuado, y que disminuyéramos el diálogo al mínimo, o bien, que el personaje se vaya al otro extremo y hable de más para tapar "inconscientemente" cualquier vacío que pueda generar la falta de habla del muñeco.
La fotógrafa Suzanne Heintz, a modo de crítica a lo que se espera de una mujer de cierta edad, utiliza maniquíes para representar situaciones cotidianas, parodiando el sueño americano.
Temíamos que no se entienda la acción, así que optamos por cambiarla, hicimos muchas pruebas desde diferentes puntos de partida, rozamos mucha veces con la comedia y lo bizarro (que era lo que temíamos desde un principio, pero que tal vez si decidíamos ir por ahí podíamos explotarlo bien). Nada surgió como esperábamos y nos quedó un engendro que no se determinaba por tomar un camino ni el otro, por lo que no transmitía nada.
Muy decepcionadas con el resultado y luego de consultarlo con Leo, Flor y Rud, decidimos volver a la idea anterior, sin embargo consideramos que nos sirvió mucho hacer esta prueba, ya que, una vez descartada, nos permitió enfocarnos por completo en el camino inicial.
En este último rodaje pusimos en práctica todo lo que veníamos planteando que íbamos a hacer en cuanto a lo técnico, y quedamos bastante satisfechas con el resultado. Personalmente me quedé con ganas de explorar una situación centrada en la relación mujer - pecera que parece interesante. Para otra vez será.
Resultado
Extras
Integrantes
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